Los Agapornis

Ayer irrumpimos en el mundo de los agapornis hablando directamente de su alimentación para que así mi amiga pudiera tener claro que le podía y que no le podía dar de comer a sus agapornis.

Hoy vamos hacer las cosas bien y vamos a comenzar por una breve introducción de estas aves.

Los agapornis son unas aves que también podemos encontrar bajo el nombre de loritos del amor o inseparables por aquello que siempre van en pareja.

Los agapornis no hablan como los loros pero son unas aves encantadoras y muy cariñosas.

Cuando vayamos por nuestros agapornis, recordar siempre que deben de ser dos y que se aseguren bien que son macho y hembra. Solo una persona especializada podrá distinguirlo.

Los agapornis son avez de la zona de África tropical y Madagascar, lo que quiere decir que le debemos de proporcionar una temperatura de entre 18 a 25 grados.

Suelen medir entre 12 a 15 cm y su plumaje siempre será verde con otros colores como pueden ser el amarillo, rojo y azul.

La jaula de los agapornis debe de ser amplia porque tienen que tener espacio para volar dentro de ella. Lo ideal es que sean de metal por aquello de la limpieza e higiene.

La jaula se debe de limpiar frecuentemente para evitar que enfermen los agaponis. Frecuentemente me refiero a limpieza diaria y en profundidad cada semana.

El bebedero se debe de cambiar a diario y lavar a diario, Loa agapornis, como cualquier ave tiene que tener agua limpia a diario.

Dentro de la jaula, comedero, bebedero, perchas para hacer ejercicios y bañeras.

De día que tomen el sol y de noche hay que tapar la jaula para que no tengan corrientes de aire. Si vivimos en zona de mucho frío y poco sol, habrá que instalar una bombilla de luz ultravioleta de 5 watts. La bombilla debe de estar al menos 3 horas encendida.

Para mantener el plumaje húmedo como si en el trópico se tratara, hay que pulverizar 2 veces al día con un pulverizador lleno de agua.

Evitar el tener la jaula en zona de corrientes de aire, con mucho frío, o en lugares donde se acumule productos químicos como puede ser el lavadero de la cocina.

Ya seguiremos profundizando en estas maravillosas aves.

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