Contaminación
Nunca había pensado que el tabaco pudiera afectar a los perros pero no solo esto sino, también, la polución, el ruido afecta a nuestros perros causándoles bronquitis, tos, alergia, cáncer de pulmón y ansiedad. Muchas veces cuando los veterinarios realizan una necropsia de un perro que vive en la ciudad se sorprenden del color negro de sus bronquios y de lo dañados que están.
Los perros tienen un sistema respiratorio muy similar al nuestro y a igual que nosotros acusan la concentración de partículas contaminantes. Además, el caminar a ras del suelo repercute en el mayor almacenamiento de contaminación en sus vías respiratorias. Las consultas veterinarias de perros con problemas en las vías respiratorias aumentan durante las épocas de ausencia de lluvía puesto que se concentra más contaminación en la atmósfera. Los perros muy chatos como el carlino o bulldog se resienten más con los altos niveles de contaminación atmosférica ya que tienen menor capacidad para filtrar las partículas contaminantes del ambiente y su sistema respiratorio queda más afectado.
También, es recomendable no solo para el perro sino para nosotros mismo un ambiente libre de tabaco. El perro es un fumador pasivo, las consecuencias del tabaco en la salud de nuestro perro pueden ser alergias, estornudos, tos o irritación de las vías respiratorias. Así que, sí nuestro perro tiene problemas cardiorrespiratorios debemos evitar fumar en casa.
De la contaminación acústica, hemos hablado varias veces en el blog. El ruido ambiental les afecta muchísimo a los perros debido a que tienen la capacidad de percibir longitudes de onda que las personas no oímos. Los ruidos como los petardos, coches, motos, alarmas, sirenas le asustan y estresan si no está acostumbrado a ellos.

Para evitar que la contaminación ambiental afecte a nuestros perros es bueno hacer escapadas al campo para que el perro pueda oxigenarse, evitar fumar en casa y exponer al perro desde cachorro a todo tipo de ruidos.
Kisses,
Olalla