El viernes antes de marcharnos de fin de semana, llevé a Kitty a la “perruquería”. Ya necesitaba un buen corte, tenía muchísimos nudos pues tenía el pelo demasiado largo. El caniche no muda su pelo por lo que hay que córtaselo, sobre todo en verano, pues pasa mucho calor.

El caniche
no muda su
pelo por lo que hay que cortárselo para evitar que se le enrede y después haya que raparles. En el
siglo XIX se extendió la costumbre de cortarles el pelo.
Existen varios cortes:
- Corte León: pelo esquilado en el cuarto trasero hasta las costillas así como el hocico (parte superior e inferior), las mejillas, las 4 extremidades (excepto los brazaletes o puños) y la cola (con un pompón esférico al final). También deben llevar bigote y se acepta que las extremidades anteriores sean en forma de pantalón.
- Corte moderno: pelo en las cuatro extremidades. El pelo de la cabeza y la cola debe ser como en el corte león.
- Corte Inglés: Es como el corte de león pero con diseños sobre el cuarto trasero tales como brazaletes y puños. El bigote es opcional en este tipo de corte.
Existen dos tipos de pelaje en el caniche, que comparten las cualidades de ser abundante, fino y lanoso. Se diferencian en:
-Ensortijado: rizado, elástico y formando bucles regulares.
-En forma de mechones: pelo apretado que forma cuerdecillas de longitud aproximadamente constante.
Lo ideal es peinar cada 2 o 3 días a nuestro caniche. Hay que revisar especialmente atrás de las orejas, en el pescuezo si usa mucho tiempo el collar, en la barriga, y en el anca, lugares donde más fácilmente se enreda el pelo.


A Kitty la suelo llevar cada tres meses, esta vez se lo han cortado más corto para que no pase calor este verano. También, le suelen hacer zapatitos. Cuando llega a casa se suele echar a dormir pues viene cansada (suele estar tres horas). Cuando vamos a recogerla siempre le reclama su premio a la peluquera.

Kisses,
Olalla 