No sin mi pelota
A todos los perros les encanta jugar a la pelota, a Kitty también. En los parques cada día veo a mucha gente que basa el paseo de su perro en llevarlo allí y tirarle la pelota. Los dueños ven como el perro disfruta, corre, hace ejercicio, y cuando vuelven a casa el perro el perro está exhausto y se va a dormir. Lo malo de este juego es que se obsesionen por la pelota. Estos perros saltan y ladran constantemente a sus dueños para que les tiren la pelota, no se relacionan con otros perros, no hacen sus deberes , no juegan con otros perros e incluso llegan a pelearse con otros si intentan robarles la pelota…
Por todo esto un experto como Ricardo Antón nos da algunas reglas básicas para un juego sano con la pelota:
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Tú inicias el juego y tú lo terminas.
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No juegues siempre en los mismos lugares.
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Si tu perro te pide la pelota ladrando, no se la des.
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Aplica el Principio de “nada es gratis“: si quieres la pelota, tienes que hacer algo. Tu perro debe aprender a esperar, dile que se siente o se tumbe, lanza la pelota y hasta que no te mire no le des la orden de ir a por ella.
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Aprovecha a ejercitar la obediencia.
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No juegues más de 10 o 15 minutos, es suficiente.
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No guardes la pelota hasta que tu perro se haya calmado. Hay que enseñar al perro a que una vez finalizado el juego no puede tocar la pelota y de esta forma que pueda aprender a desconectar.
En su opinión, la mejor forma de jugar con tu perro y una pelota es esconderla y que la encuentre con la nariz:
- El perro usa la nariz y no los ojos, por lo que estamos fomentando la utilización de su mejor sentido.
- Con menos repeticiones, el perro se cansa más y de una forma más natural. 5 minutos de búsqueda ininterrumpida son mejores que lanzarle 100 veces la pelota.
- Es un ejercicio con menos excitación.
- Se puede aplicar el Principio de “nada es gratis“.
En resumen, para prevenir la obsesión de tu perro con la pelota debes controlar su nivel de excitación, el dueño inicia y finaliza el juego; durante el juego se deben aplicar ejercicios de obediencia. El juego con la pelota bien realizado, es un complemento fantástico a un buen paseo.
Kitty juega ella sola a la pelota en casa y en el pueblo en el jardín, nunca le he llevado la pelota a la calle pues creo que es mejor que olisquee y olfatee en vez de estar todo el rato pendiente de la pelota.
¿Están vuestros perros obsesionados por la pelota?
Kisses,
Olalla